Paz, Tolerancia y Verdad
La Letra fuera de
contexto, es letra muerta
Fue a partir del siglo XVIII cuando las instituciones iniciáticas, principalmente la masonería especulativa, comenzaron a multiplicarse y a diversificarse en una multitud de obediencias y ritos. Ritos, cuyo simbolismo llevaba implícito un profundo esoterismo relacionado con lo más profundo de la gnosis cristiana y del incipiente conocimiento de la cultura del Egipto de los faraones. La diversificación de la que hablamos, desde aquella época, se ha venido produciendo mediante la transmisión o intercambio de patentes o linajes.
La cosa no fue mal, mientras esos
linajes eran concedidos mediante iniciaciones, previa instrucción; pero empezó
a prostituirse en cuanto fueron fruto de intercambio mercantil vía dinero o
contra prestaciones similares; es decir, intercambio de linajes. Yo te confiero
todos estos grados de mi Fraternidad a cambio de los grados de la tuya y además
se hacía y se hace sin iniciación o instrucción previa sino mediante meras imposiciones;
es decir: Yo te confiero este grado o dignidad, te adjunto sus rituales y
símbolos y a andar para adelante.
En ese instante es cuando
comenzaron a hacerse las cosas mal, dado que la letra impresa con la que
estaban confeccionados los rituales no son otra cosa que una parte del medio de
transmisión de las iniciaciones. Se creía que, con realizar el teatrillo
iniciático todo estaba arreglado para poder iniciar una Fraternidad que además
poseía una patente, que algún precio habría costado, con el fin de demostrar al
público su verdadero linaje. A partir de ese primer instante, las
organizaciones transmitieron un linaje histórico verdadero; pero perdieron su
verdadero linaje espiritual, dado que la letra de esos documentos no era más
que letra muerta.
En la actualidad, la cosa ha ido
empeorando pues además de transmitirse los linajes sin un verdadero egregor que
los ampare; en muchas ocasiones son falsos y en el resto producto de
una apropiación indebida, con lo cual se perdió tanto el linaje espiritual como
el histórico o documental.
Los contra iniciados, tanto
receptores como emisores de toda esta documentación son incapaces de comprender
que para ser un verdadero Adepto o Iniciado, no es solo necesario realizar una
representación teatral siguiendo al pie de la letra los textos e instrucciones
sino que esa transmisión debe de realizarse en un Templo consagrado, con un
Egregor activo, y mediante oficiales debidamente instalados “consagrados”. Solo
así, la Iniciación tiene alguna posibilidad de ser efectiva y por lo tanto de adquirir
un verdadero linaje espiritual, que es lo que importa ante nuestro Ser Interno,
independientemente del linaje histórico o documental que solo tiene valor ante
el mundo exterior.
Por lo tanto, que se le quite a
cualquiera de la cabeza que con la simple compra o intercambio de una serie de
patentes es suficiente como para montar una verdadera fraternidad iniciática.
Es posible que pueda servir para atraer, en primer lugar, a una suerte de
despistados buscadores y después ir aumentando, en todos los sentidos, la
importancia de su nuevo chiringuito contra iniciático, de cara al mundo profano
o de la calle; pero no dejará de ser nunca más que eso: Una Organización Contra
Iniciática sin capacidad espiritual alguna para transmitir cualquier tipo de
iniciación efectiva. A lo sumo, habrá adquirido y conformado un nuevo juguete
sin utilidad de crecimiento espiritual alguno.
Todavía hoy en día, en el Mundo y
especialmente en los Estados Unidos de Norte América, existen muchos individuos
de altos grados que viven traficando con las dignidades de grados rituales de diferentes
obediencias e instituciones iniciáticas a cambio de algún tipo de emolumento
económico, hasta el punto de llegar a transmitir burdas falsificaciones sin
valor alguno a ningún nivel, sea éste histórico o espiritual y provenientes de
antiguas fraternidades extintas o que jamás existieron en la realidad.
A partir de la existencia de
Internet y la popularidad de las redes sociales se ha agravado este asunto, hasta
tal punto, que podríamos decir que más del noventa y cinco por ciento de la
documentación iniciática se encuentra en abierto y a disposición de cualquiera
que la quiera encontrar; pero entre toda esa maraña, ¿tenemos forma de saber qué
documentación es auténtica y cuales son una burda falsificación?
No hay modo de saberlo, para
profanos sin algún conocimiento de las sociedades iniciáticas; pero eso es lo
de menos, pues tanto las falsificaciones puras y duras como la documentación
verdadera e íntegra no valen nada, incluso en manos de verdaderos iniciados,
más que como mero pasatiempo histórico y que si se intentara llevar al campo
iniciático, dado que se trata de letra muerta, no les podría conducir a algún
lado salvo a la contra iniciación; es decir a la posesión de algo ilegítimo y
que en algún momento de su existencia, de algún modo, se deberá devolver.
Por lo tanto, sepan que es algo
estúpido buscar el coleccionar títulos y grados que no nos hayan sido conferidos
de forma legítima mediante iniciación y en templos consagrados con un legítimo
Egregor que comunique con la verdadera Fraternidad Espiritual, ubicada en la
Esfera Reflectora como intermediadora entre el Mundo Original o Pleroma y
nuestro mundo reflejado de las realidades ilusorias, porque toda escritura
humana es una suerte de metalenguaje que posee diversos niveles de
interpretación.
Uno es el meramente profano o
concatenación de palabras que intentan transmitirnos una determinada
información, muchas veces encriptada a nivel espiritual. Otros muchos,
pertenecientes a diferentes grados evolutivos, y que solo podrán ser entendidos
por una parte de nuestro interior y solo si vibratoriamente se encuentra sintonizado para asimilarlo, porque en caso contrario pasará ante nuestra vista
como de algo invisible o inexistente; es decir, la verdadera iniciación la
tendremos ante nuestros ojos; pero estos serán incapaces de ver la verdad.
Solo cuando esa legítima
documentación caiga en manos de verdaderos iniciados, transmitida por iniciados, nunca contra iniciados,
es que podrá ser conferida con toda legitimidad, en un entorno consagrado,
mediante un sacerdote o sacerdotisa iniciados y con la colaboración de
diferentes oficiales, a aquellos individuos o postulantes que se encuentren
preparados para recibirla, nunca de otro modo.
Para terminar digamos que se
encuentran en su legítimo derecho de, a modo de filatélicos o numismáticos, coleccionar todos aquellos documentos que se encuentran en diferentes medios y
a libre disposición de cualquiera; pero sean conscientes de que su tráfico y
mercantilización no es que sea ilegal, eso es irrelevante, sino que está contra
indicado con el progreso espiritual de su poseedor.
Además si piensa, de forma posiblemente legítima, que su dispersión al público en general, puede ser positivo para el
crecimiento espiritual de la mayoría, recuerde que solo una parte de su
verdadero contenido, la parte profana y sin valor, llegará a la mente de los lectores; la otra
parte les será velada en tanto en cuanto no se encuentren sintonizados para
recibir tan elevada, vibratoriamente hablando, enseñanza gnóstica proveniente
del Pleroma o Mundo Original.
Ahora ya no son ignorantes y
podrán reconocer un billete auténtico de uno falso. Si se llaman a engaño ya
será problema de ustedes y sepan, además, que no solo está en juego sus ahorros
en dinero sino algo mucho, muchísimo más importante, su progreso espiritual
que, en caso de caer en grupos contra iniciáticos, vendría a ser como caer en
profundos pozos u olvidaderos que nos retrasaría hasta límites inimaginables el
conseguir una verdadera y legítima iniciación.
Aquí no hemos dado nombres de
instituciones ilegítimas porque no queremos entrar en una polémica estúpida y
sin sentido; que además estaría desgastando parte de nuestra limitada fuerza;
pero creo que el lector, nuestros estudiantes, tienen suficiente material con
lo aquí expuesto para alimentar su criterio y discernimiento y no caer en manos
de almas perdidas. En todo caso, mientras tenga aliento, estaré a vuestra
disposición si requerís de nuestra humilde orientación.
En L:.V:.X:. Luz, Verdad y Amor; que las Rosas del Alma florezcan majestuosas sobre la Cruz de vuestro Cuerpo material.
ARALBA RC