martes, 17 de marzo de 2015

Lección 59, Segundo Grado, Primera Orden (La Confessio Fraternitatis I)


O bien 

Confesión de la Insigne Fraternidad de la muy honrada Rosa-Cruz dirigida a los hombres de ciencia de Europa, año de 1615


Paz, Tolerancia y Verdad


La Confessio Fraternitatis es el segundo manifiesto de los rosacruces que es reconocido como tal, saliendo a la luz justo un año después de la precedente Fama. Como su antecesor escrito, la Confessio es anónima; pero salió tanto en latín como en alemán. Se ve con cierta claridad que su pretensión es la Reforma de la Ciencia y del pensamiento o Filosofía que la sustenta. De algún modo es premonitoria, junto con la Fama, de la Ilustración del futuro Siglo XVIII.

"En negrita el Texto de la Confessio traducción de los editores Muñoz Moya y Montraveta, en rojo las indicaciones de Aralba. Hemos cortado los grandes párrafos para introducir los comentarios".

Primer Capítulo

Los rumores y revelaciones sobre nuestra hermandad o confraternidad que han llegado a muchos oídos y cuyo origen se encuentra en la precedente publicación de la Fama, no deben ser tenidos ni considerados por nadie como irreflexivos o inventados completamente: menos aún como un fruto que brote de nuestro antojo.

Se intenta hacer ver a los lectores de la Confessio que los manifiestos rosacruces no se tratan de alguna broma macabra y que, por el contrario van muy en serio; pero queremos hacer ver un pequeño matiz que pudiera pasar desapercibido por la mayoría. Se dice que no deben ser tenidos como inventados completamente. Luego, algo de invención sí que hay en los manifiestos rosacruces. Algo que el propio Escritor, ya veremos que se trata de una persona más que de un colectivo, considera como algo novedoso y traído a colación por él y no se trata de otra cosa que una nueva forma de acercarse a la Ciencia, desde un punto de vista desvinculado de la Teología.

Actualmente el mundo está a punto de alcanzar su estado de reposo antes de caminar con premura hacia un nuevo amanecer una vez acabado su periodo y su ciclo. Jehová, nuestro Señor, es quien invierte el curso de natura. Él es quien revela actualmente a los que no prestan atención a ello o que ni siquiera piensan en aquello cuya búsqueda costaba antes gran trabajo y una labor infatigable. Él es quien lo ofrece graciosamente a los que manifiestan deseo de ello, a la vez que también obliga a los refractarios. Desea que los hombres piadosos se vean aliviados de las fatigas de esta vida humana y libre de las tempestades provocadas por la inconstancia de la fortuna: que los malvados aumenten y acumulen su malignidad y los castigos que ella merece.

Se refrenda, de nuevo, tal y como vimos con anterioridad en la Fama Fraternitatis, que el Autor es un verdadero creyente en Dios, en Jehová; esto es importante dado que no indica Yahveh, como también seguiremos viendo que se referirá a oraciones más que a rezos y acompañado de un espíritu profético sempiterno nos confirma, de forma indeleble, que quien se dirige a nosotros es un perfecto Cristiano Protestante. Aquí no somos capaces de observar el más mínimo atisbo gnóstico antiguo dado que Jehová, el Demiurgo creador del Mundo, para aquellos era un Demonio más que el verdadero Dios. Esto es así o, quien escribe, conocía perfectamente que Jehová, El Demiurgo no es ese Gran Presuntuoso del que hablaban los antiguos gnósticos cristianos y sí, efectivamente, Jehová es el Dios Padre que vive en nosotros, como Adam Kadmón, y no el usurpador que habría terminado tomando el propio nombre del Creador de los arcontes y elohims.

¿Cómo podríamos nosotros ser sospechosos de herejía, de manejos y de complots culpables contra la autoridad civil, cuando condenamos los sacrilegios de los que es objeto nuestro Señor Jesucristo y de los que son culpables tanto Oriente como Occidente (entendamos Mahoma y el Papa) y cuando presentamos y dedicamos nuestras oraciones, nuestros misterios y nuestros tesoros, al jefe supremo del Imperio Romano?

Ha transcurrido todo un año entre la publicación del primer manifiesto y este segundo. Tiempo más que suficiente para que su autor pudiera haber sido testigo de los múltiples calificativos que habrían recibido los supuestos creadores de la Fama; pero él se consideraba un auténtico cristiano y muy alejado de lo que en aquella época podría ser considerado como herejía. Se nos vuelve a mencionar a Mahoma y al Papa, como si no fuese suficiente, como para demostrarnos que él se encontraba subido a otro Barco, el de la Reforma Protestante y que tanto el Islam como el catolicismo sí eran vistos por él como terribles herejías contra el verdadero cristianismo original. Aquí, con seguridad, se refiere a Matías de Habsburgo: Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico.

Nos ha parecido sin embargo bueno y oportuno, por respeto hacia los hombres de ciencia, completar nuestro resumen formulando en términos mejores los pasajes demasiado insondables y oscuros de la Fama, y también colmando las lagunas que determinadas intenciones justificaban. Con ello esperamos ganar la estima de los hombres de ciencia y acrecentar la adhesión y su consentimiento al proyecto que acariciamos.

Estudiado con detenimiento podemos comprobar que se trata de una confirmación de lo anteriormente expuesto y utilizando un lenguaje quizá más claro y accesible; pero hay dos cosas importantes que quisiéramos remarcar: Que se trata de un escrito patriótico; es decir, muy alemán y dirigido, en este caso particular, a los hombres de ciencia de la época.

Segundo Capítulo

Por lo que respecta a la conversión y enmienda de la filosofía hemos explicado suficientemente, tanto como hoy es necesario, que el cuerpo dentro de la dicha filosofía está enfermo por completo y es enteramente deficiente.  Más aún: ello no ofrece la menor duda a nuestros ojos pese a las numerosas afirmaciones que le atribuyen una salud y una fuerza cuyo origen ignoro. Vive sus últimos momentos. Se aproxima su partida.

La Mente preclara del expositor es capaz de ver con claridad que el pensamiento, la filosofía a la que se refiere y en la que se sustenta la ciencia de su época, no puede ser libre si se encuentra supeditada a pensamientos expúreos o supersticiones de carácter religioso; es decir, que dependen del designio de los teólogos y supuestos hombres de Dios, sus sacerdotes, obispos y cardenales. A eso se refiere con ese modo de pensar enfermo, esa filosofía enferma y encapsulada a la que el aire de la verdad era imposible que pudiese liberarla. Subrayo cuyo origen ignoro. Con este pequeño desliz utilizando la primera persona del singular, el escritor de la Confessio, que en todo instante viene utilizando la primera persona del plural, nos demuestra que en realidad el Autor de los manifiestos se trataba de un único individuo y esto no quiere decir que no hubiese estado de acuerdo con un colectivo mayor.

Sin embargo, al igual que es habitual que, por ejemplo, la naturaleza invente un remedio contra una enfermedad nueva e insólita en la propia morada donde prendió, hete aquí que se revelan y surgen de la tierra los antídotos contra la multitud de males y accesos que padece la filosofía. Son los únicos buenos y que convienen de manera suficiente a nuestra patria, los solos que pueden permitir recobrar la salud a la filosofía confirmándole, por así decir, una apariencia y un brillo radicalmente nuevos a los ojos de un mundo cuya renovación es inminente.

Con ello nos indica que a pesar de que el conocimiento, el pensamiento, la filosofía ha venido siendo sometida, por intereses bien conocidos, de ciertos individuos y grupos de poder, sin embargo, la Verdad se abre paso y termina reconduciendo su camino por veredas más libres y lejanas a la superstición del falso conocimiento. Él lo denomina como una Ley Natural, como si de un río se tratase y cuyo cauce hubiésemos alterado; pero que transcurrido un tiempo, lo hubiese recuperado por el propio empecinamiento de los designios divinos de la propia Naturaleza y sus leyes inmutables.

No poseemos otra filosofía sino la que es la regente y la suma, el fundamento y la sustancia de todas las facultades, de todas las ciencias, de todas las artes. Filosofía que, bajo la óptica de nuestro siglo, se alimenta mucho en la teología y en la medicina, pero poco en la sabiduría jurídica. En resumen: filosofía que elucida y disecciona al hombre hasta la saciedad, solo al hombre. Filosofía pues en la que encontrarán más maravillas y misterios que los que nunca pudieron adquirir, elucidar, admitir como dogma, todos los hombres de ciencia que respondan a nuestras exhortaciones y se comprometan en nuestras cohortes.

Aquí se muestra lo que anteriormente dijimos y ofrece a los hombres de ciencia, de su época, una nueva forma de ver la filosofía, un nuevo modo de pensar más amplio y que no se someta al puro ámbito de lo personal del Ser Humano sino que traspase sus limitadas fronteras para dirigirse a ámbitos más jurídicos que físicos y alejados de los dogmas preestablecidos por sus antecesores hombres de ciencia. Justo por ello, este periodo de la Historia Humana, el Siglo XVII, debería ser mencionado como el Siglo de la pre-ilustración o de la Iluminación Rosacruz, porque preparó al Ser Humano, más concretamente a hombres de ciencia y pensadores, para retirar de sí todo aquello que hasta el presente había sido dado como inmutable y dar paso a las nuevas ideas por muy peregrinas que les pudiera parecer a su previo condicionamiento mental; es decir para preparar el advenimiento de la Ilustración del siguiente Siglo XVIII o de la Ilustración.

En L:.V:.X:. Luz, Verdad y Amor; que las Rosas del Alma florezcan majestuosas sobre la Cruz de vuestro Cuerpo material.

Aralba

domingo, 15 de marzo de 2015

Lección 58, Segundo Grado, Primera Orden (La Simbiosis Humana/ Concepto Rosacruz Filosofía Religión)


Paz, Tolerancia y Verdad


La Simbiosis Humana

La relación entre todos los Seres se puede reducir a dos formas esenciales, la simbiosis y el parasitismo que no es otra cosa que una versión agresiva de la primera. El cuerpo humano es una simbiosis, colaboración, de millones de células tan íntimamente ligadas que terminan formando órganos y organismos definitivos; pero los cuerpos humanos también desarrollan una simbiosis muy estrecha con otras bacterias y hongos como los encontrados en el sistema digestivo humano y sin las cuales no se podría sobrevivir. Hasta aquí, hemos visto, como no existiría gran diferencia entre los organismos sean estos, vegetales, animales o humanos.

Existe otra simbiosis que los científicos ni siquiera han contemplado como posibilidad, ya que entraría frontalmente en competencia con las religiones establecidas. Olvidándonos, en principio, de las simbiosis mencionadas, en el Ser Humano, existiría otra forma de simbiosis entre la maquina biológica humana, con su propia inteligencia automática de subsistencia, y un agente externo, que se ha venido a denominar como Espíritu. 

La simbiosis espiritual, ha permitido al Ser Humano despegarse de sus hermanos animales, en la pirámide evolutiva, convirtiendo a éste en un Ser más longevo debido a condiciones higiénicas y de alimentación artificiales que, de otro modo, habrían acortado la vida de los cuerpos biológicos de la especie humana.

La ciencia no ha sido capaz, aún, de descubrir y, menos aún, de separar a ese agente desconocido que se ha venido a denominar como Espíritu; ya que se trata de un Organismo extraterrestre que se encuentra íntimamente vinculado, por mutación y evolución, con el ADN del simio del que procede nuestra Especie. Todas nuestras células, no solo las cerebrales, están involucradas en esa simbiosis entre la naturaleza biológica del Simio y la espiritual del Ser alienígena que también somos.

Es por ello que, en nuestra vida compuesta, se desarrolla una especie de lucha interna entre lo Natural, de este mundo, y lo Espiritual, lo ajeno, extraño, de otro Mundo y que lucha por prevalecer. En cierto modo, podría decirse que esta simbiosis tiene muchas connotaciones parasitarias ya que mientras uno crece, el Alma Espiritual, el otro mengua, el alma biológica. Esto debe de ser así ya que los seres vivos no son otra cosa que máquinas biológicas con su propia inteligencia artificial. 

Una inteligencia programada para producir la supervivencia del organismo y de la propia especie durante un tiempo limitado. El Espíritu del Alma humana, a veces lleva bien eso de convivir con ese instinto de supervivencia; pero en muchas otras ocasiones, cuando el fin propuesto lo precisa, el Espíritu decide sacrificar su propia integridad, como organismo biológico, en beneficio de algo que él conoce muy bien y entiende como superior; pero que choca frontalmente con la programación de supervivencia de su vehículo orgánico de manifestación.

En un principio, el lector pudiera pensar que ese parasitismo es injusto dado que el Ser biológico está a expensas de lo que decida su partenaire en la simbiosis; pero hay una cosa que la inteligencia biológica desconoce y que no está preparada para comprender. Como se ha dicho, el Ser biológico está constituido para sobrevivir durante un periodo de tiempo y que se encuentra previamente programado en su ADN. Evidentemente, esa programación puede verse modificada por accidentes o agentes externos agresivos como la falta de aire, exceso de radiación, falta de agua etc., etc. 

El Espíritu sin embargo trasciende de ese periodo de supervivencia, tan breve, y migra de unos cuerpos a otros, conservando tan solo una especie de bíos informática que lo incita a seguir manipulando, por mutación, los cuerpos en los que penetra. Así los convierte, cada vez más, en propios y utilizables con el único fin de alcanzar su fin programado: El conseguir un Cuerpo antaño perdido. Es por tal motivo, mal que nos pueda parecer, que el Hombre biológico, como alma, está condenada a perecer definitivamente con el fin de dar paso al Hombre Nuevo, Espiritual, Eterno e Inmortal.

Cómo se produjo esa simbiosis entre lo natural y lo espiritual es algo que ya hemos abordado de forma repetida, sirva ahora, tan solo, la comprensión del porqué muchas veces hacemos algo que creemos impropio y dejamos de hacer las cosas que nos debían de producir beneficio. Son dos seres los que conviven en un único vehículo de manifestación; pero solo uno de ellos tiene futuro. El otro, lamentablemente, no.

Concepto Rosacruz Filosofía Religión

En el transcurso de la existencia del Ser humano, la Consciencia ha transmitido al hombre una especie de enfermedad y que lo acompaña, desde que tiene uso de razón hasta la tumba: La incertidumbre, las preguntas existenciales.

Como medicina para mitigar ese mal, la especie humana, en sus individualidades, ha intentado, por medio de la lógica y de la razón, calmar el ansia producida por esas preguntas sin contestar: Quien soy yo, de donde vengo, que hago aquí y a donde voy. Esa medicina es la Filosofía, que al contrario de lo pretendido, ha favorecido que surjan más preguntas sobre otras preguntas, en una cadena que parece no tener fin. Esa circunstancia ha permitido el nacimiento de las ciencias del conocimiento.

Por otro lado, algunos desaprensivos, teniendo el Poder del conocimiento, han hecho uso de esa facultad para manipular a sus congéneres en su propio favor. Esa es la Religión, la cual no induce preguntas en los cerebros de sus practicantes; en todo caso dudas que no es lo mismo. Al contrario que la Filosofía, que intenta contestar a las preguntas existenciales, la Religión crea doctrinas dogmáticas en las que hay que creer aunque no tengan algún tipo de consistencia lógica.

Hemos visto como el sistema natural de la Filosofía provoca un perpetuum móvile de preguntas y respuestas que conduce a una evolución progresiva del conocimiento del Ser Humano; por el contrario la Religión, por su dogmatismo, frena ese conocimiento provocando incluso una especie de falsa consciencia de culpa en los individuos practicantes, con lo cual, podría decirse que es una anti-medicina.

Con la filosofía se pretendía calmar la ansiedad provocada por los efectos secundarios de la adquisición de la Consciencia; por el contrario, la Religión convierte al hombre en un ser cargado de infelicidad ya que se siente culpable de todo lo que realiza y le sale mal e incluso de la situación de su entorno familiar, vecinal, regional, etc., etc... 

Eso es así, porque en el fondo, aunque el hombre quisiera protegerse durante un cierto tiempo bajo el paraguas de la religión que contesta a sus preguntas existenciales bajo el prisma de: es palabra de Dios y hay que creerlo, es decir la Creencia, las dudas vuelven a resurgir, como si de algo podrido se tratase y que quisiésemos enmascararlo con algún tipo de perfume. 

En principio parece desaparecer bajo los poderosos efluvios de la Doctrina; pero a la postre, el binomio Inteligencia-consciencia vuelve a tomar el mando y surge la duda, porque algo no casa. La Consciencia sabe que algo no anda bien, que no es razonable o lógico y termina comprendiendo que está siendo manipulada y se revela.

Esa es la principal causa de que el pensamiento religioso termine transformando a sus practicantes en terribles y fanáticos guerreros que luchan por mantener sus doctrinas ancestrales, contra los rebeldes que, por el contrario, intentan que no se les engañe más. La Filosofía no es dogmática, la Religión sí y dado que el conocimiento no es nunca perfecto y siempre se va modificando conforme transcurren las experiencias, la filosofía evoluciona y con ella la propia Alma humana. La Religión la enclaustra y no la deja respirar, intentando mantenerla dormida y creo que ya sabemos por qué.

En L:.V:.X:. Luz, Verdad y Amor; que las Rosas del Alma florezcan majestuosas sobre la Cruz de vuestro Cuerpo material.


Aralba

sábado, 14 de marzo de 2015

Lección 57 (El Mundo/ Concepto Rosacruz de La Metanoia)


Paz, Tolerancia y Verdad


21 (2+1=3) El Mundo

Cielos nuevos y tierras nuevas; pero en el Pleroma o Esfera del Mundo Original. Donde antes  no existieran más que Entidades Divinas moviéndose anárquicamente, ahora ha resurgido, en halo de perfección, un Mundo nuevo a imagen y semejanza del que hubo un día en un Multiverso fantasmagórico. Este nuevo Mundo de una belleza extraordinaria permanecerá en la Mansión Eterna del Hombre, por los siglos de los siglos…

Bienaventurados los pobres de Espíritu porque ellos heredaran la Tierra. Todas aquellas criaturas que jamás pertenecieron a la Estirpe de los Ciudadanos del  Pleroma; pero que por cualquier circunstancia, los Eones decidieron que debían preservarse, serán reconstituidos, según su memoria, en esta Tierra y en otras múltiples Tierras. 

Ellos son llamados los Hijos de Dios, porque de los dioses emanaron, aunque sus formas fuesen constituidas por los Arcontes demiurgos, también ellos criaturas creadas.

Los propios Legisladores, solo algunos, aquellos como Prometeo, alias Luz Bel el Portador de Luz, también en este nuevo Multiverso, retomarán su antigua consciencia como premio a su rebelión contra el Demiurgo de Demiurgos, el Gran Presuntuoso. 

Gracias a ese enfrentamiento contra sus hermanos Arcontes, mal llamados ángeles Y Potestades, las partículas divinas prisioneras en los cuerpos humanos, pudieron, en un momento dado, tomar consciencia de su situación y preservarse y evolucionar dentro de un cuerpo animal prestado.

En este Nuevo Mundo, regido por el Eón de la divina Isis, toda criatura viva posee un aura de espiritualidad que le concede la sabiduría plena. Tanto las antiguas Bestias, como la Fieras salvajes antaño, disfrutan de una nueva Vida completa y sin miedo a ser atacadas o devoradas. 

Los antiguos Eones, Seres Humanos Verdaderos, conviven en igualdad de condiciones con sus propias creaciones. Al fin y al cabo todo pertenece a una misma esencia y comprendieron que es mejor moverse entre ellos más como divertidos hermanos que como severos padres.

En el Pleroma, Mundo Original, de los Eones, Dioses, jamás existió el sexo hasta este mismo instante. Una de las cosas buenas que la Entidad Horus trajo de la Cósmica Obra de Teatro. Aquí los Arcontes ya no actúan como Demiurgos o Legisladores. 

Nada necesita ser sustentado. No hay pilares de la Tierra ni Ángeles que soporten los vientos de los cuatro puntos cardinales. Aquí, los Arcontes no dejan de ser más que otros intérpretes sin más valor que las criaturas que antaño posibilitaran la necesidad de su propia creación.

Solo los Hombres conscientes poseen el Poder; pero aquí, dentro del Pleroma, no es necesario su uso. Aquí la Justicia es Real, auténtica. La información de los gozos se comparte al instante con toda la nueva creación de Isis. 

Las Criaturas de la Naturaleza, ahora sí, saben lo que son los Humanos. Nunca más huirán de ellos sino que se les acercarán para recibir sus caricias y Amor divino. También saben lo que son ellos y que nunca existieron; pero gracias a la luz de lsis, la Gran sustentadora, no necesitan alimentarse ni defecar, ni nacer ni morir.

Ahora los cuerpos, como el de los Dioses, son cambiantes y multiformes. Han conseguido el privilegio de no estar atados a un pesado cuerpo que les impida moverse instantáneamente y a voluntad. Todas las cosas, incluso las aparentemente inanimadas, pueden tomar vida e inteligencia si así lo desean. 

El Júbilo que antes solo se podía manifestar por medio de variaciones luminosas como las de los cefalópodos de antaño; ahora también se pueden acompañar de sonrisas, risas y carcajadas.

En el otro Mundo, el Hombre Verdadero compartía sentimientos e información mediante la unión de sus cuerpos en uno solo andrógino, que posteriormente se volvía a dividir. Ahora también poseen el sexo con el que poder disfrutar a placer cambiando de órganos cada vez que así lo desean. 

Terminaron los grados de Iniciación de Isis y ahora comienzan los grados de Osiris. Hasta este instante, en el Mundo de Isis, jamás fue posible. Ahora todos formamos parte de un mismo Ser, pero diferenciado.

Concepto Rosacruz de La Metanoia

La Metanoia no es una oración religiosa, tampoco es una plegaria o un lamento al uso. La Metanoia es un clamor del espíritu del Hombre despierto hacia su Eón.

Ese clamor individual que se transmite como si de una frecuencia electromagnética se tratase no pretende despertarlo de su largo letargo. Eso es imposible. La Metanoia no se expresa con palabras del lenguaje humano, con sonidos vocales o lamentos internos.

La Metanoia surge como una plegaria metafísica de carácter mágico, en estado de meditación, con el fin de hacerla rebotar en el Eón, particular del espíritu residente en un cuerpo material determinado, con el fin de que se dirija hacia otro Ser afín, de polaridad opuesta para que, de este modo, pueda recibir la Llamada de que su Gemelo del alma está despierto y que el encuentro debería de producirse.

No obstante, hay otra Metanoia más elevada y que aún no se ha producido en el Cosmos, cuando esas almas bipolarmente diferentes pero complementarias, emiten, en un estado Tántrico, una Metanoia doble; pero entrelazada y convertida en única. Solo entonces, El Eón propietario de sus espíritus no solo no rebotará la Señal hacia el Cosmos, sino que dejándola penetrar en el interior de la Estrella, despertará de ese sueño tan largo como el Tiempo que lleva existiendo el Multiverso.

La mayoría de las oraciones y plegarias dirigidas a determinados dioses o divinidades, no solo no alcanzan su  objetivo sino que son recogidas por las inteligencias arcónticas y utilizadas para los propósitos particulares de los que ya hemos hablado, perdiéndose para su propósito original.

En muchas ocasiones, los propios Arcontes responden a dichas oraciones y se producen presuntos milagros que son tomados por los creyentes como respuestas de sus dioses a sus plegarias; pero nada más lejos de ello, ya que lo único que se pretende con ello es mantenerlos engañados y prisioneros de sus propias doctrinas, lo cual los convierte en herramientas inoperantes para poder despertar a su Eones respectivos.

Todos los Eones del Universo están entrelazados por unas vías de comunicación desactivadas, que funcionan como si de agujeros de gusano cósmicos se trataran. Los propios Eones de cada Universo están entrelazados entre sí; pero también con el resto de Eones que se encuentran en los otros Universos del Multiverso y con sus partículas espirituales que se encuentran dispersas por todos los cosmos posibles. Esas vías de comunicación, extrañas a la burbuja en la que está contenido el Multiverso, son las que utilizan los espíritus para transmitir sus Metanoias.

Cuando un Espíritu determinado intenta comunicar con sus iguales, activa estas vías de comunicación de forma automática y de ese modo los Legisladores no pueden tener acceso a dicha información. 

Gracias a esas vías de comunicación, formadas en el mismo momento que se produjera el primer Big Bang del Multiverso, también denominadas como súper cuerdas, es posible viajar en el Espacio Tiempo a mayores velocidades que las permitidas por las leyes físicas y que los Arcontes vigilan porque no dejen de ser cumplidas.

Eso también hace posible que determinadas razas humanoides puedan realizar viajes en el Tiempo y a otras dimensiones; es decir, que se pueda viajar de un Universo a otro distinto; pero que están ubicados dentro de la Burbuja primordial del Multiverso.

Una vez que un Eón pueda ser activado gracias a la Metanoia de dos Almas Gemelas, en un estado Espiritual Tántrico, se despertará su Eón y se producirá una reacción en cadena en todo el Multiverso. Entonces, solo entonces, todos los Eones despertarán tomando consciencia de la situación y  activando sus espíritus individuales, atrayéndolos hacia sí. 

Al mismo tiempo, según la programación original, los Arcontes se desactivarán y el único Eón ya formado como el Nuevo Adam Kadmón, retornará al Pleroma y será el final de este anómalo Mundo y el Principio de algo nuevo y maravilloso dentro del propio Pleroma.

En L:.V:.X:. Luz, Verdad y Amor; que las Rosas del Alma florezcan majestuosas sobre la Cruz de vuestro Cuerpo material.


Aralba

viernes, 13 de marzo de 2015

Lección 56 (El Juicio Final/ Concepto Rosacruz de los Arcontes devoradores de Luz)



Paz, Tolerancia y Verdad


20 (2+0=2) El Juicio Final

Siempre se ha entendido que un juicio conlleva premio o castigo; pero eso solo sucedía en el Mundo extinguido de los Efectos. En el Mundo de los Dioses Eternos solo se trata de un informe de las vivencias experimentadas. Todo lo que pudiera ser considerado malvado, grosero y que no podría traspasar el umbral ha quedado transmutado en la Luz que siempre fue en esencia. No existen cielos, donde la contemplación eterna a un dios absoluto es el único fin, ni infiernos, en cuyo seno, se castiga a los ignorantes que han realizado el Mal.

Todo aquello que no tuvo vida propia en aquel sombrío Mundo, ha pasado a formar parte de la corporeidad de los Dioses, pues de ellos salieron y así también regresaron, con posterioridad, a su seno. Las Criaturas, Espíritus, que sí tenían vida propia recobraron su consciencia y al instante se pusieron a transmitir sus experiencias en el inframundo de la Crisálida abandonada.

Los Hombres del Mundo Original, conocidos antaño, como Dios, pertenecen al que se creyera, de forma incorrecta, como el Mundo caótico del Loco. Los habitantes de ese Plano son los hermanos naturales del Mago que provocara la creación del Teatro Cósmico y cuya historia atemporal permanece inscrita en los anales de este sublime libro de arcanos, Arquetipos de Luz Bel. Ellos dan la bienvenida al nuevo Ser, antiguo él; pero remozado en sus experiencias. Las Trompetas son el instrumento que usan para dar la Señal de que Shambala ya no es necesario y que Horus, con Isis y Osiris en su seno, ya ha penetrado en su añorada Casa.

La Esencia limpia y majestuosa, tanto del Emperador como de la Emperatriz y del Héroe Enamorado viene con él, con el fin de enriquecer la rutinaria eternidad de los Hombres Verdaderos. Su Genética más profunda está siendo enjuiciada, inspeccionada. Ya, los indefinidos y múltiples informes han sido dados por buenos y con una terrorífica explosión, el nuevo Eón regresa a su hogar. Esa explosión son las trompetas de bienvenida del Juicio Final. Atrás nada queda, pues cuando todo comenzó nada había y lo que hubo después ya regresó, como no podía ser de otro modo.

Todo ha sido reducido a una divina memoria. El Eón como si de un inmenso y cósmico vehículo interestelar se tratara, se va disolviendo para dar paso a todos sus moradores. Aquellos Eones que en un tiempo indefinido dieran luz y energía a las criaturas que formaron la cósmica Obra de Teatro. Todos ellos salen jubilosos, en forma humana, etérea y luminosa. Sus hermanos les reciben con los brazos abiertos con sus inmaculados ojos cargados de lágrimas de alegría.

Como en un Nirvana, ahora todos son uno. Siempre lo fueron hasta que al Supremo Ilusionista le diera por sorprender a sus hermanos del alma. En el Mundo Original apenas han notado el paso del tiempo; pero Adam Kadmón, tras su paso por el Infierno de la Materia, ha regresado bien cambiado. Sus hermanos escuchan sus batallas. Batallas que ellos observaron desde la Seguridad de su Hogar; pero solo ahora pueden entender con meridiana claridad, cuales fueron los sentimientos de su Hermano plural.

Los Juicios del Hombre Original no son como los de la extinta humanidad. Aquellos no eran justos ni conocían la equidad. La Justicia jamás debería de haber sido ciega y pesar en una balanza. Si se pesan las almas hay que estar bien despierto  para no caer en la injusticia. Aquí no sucede esto, ni podría suceder jamás ya que hasta los pensamientos más recónditos son conocidos por todos los Humanos. Ellos saben, a ciencia cierta, que el Mal es imposible que pudiera tener cabida en el corazón de Dios.

Ya todo ha terminado, comprendo; pero no. Se me ha quitado la venda de los ojos y ahora entiendo que lo que pretendía que fuera el final, solo se trata de un nuevo principio; pero un Principio donde saldrán renacidos nuevos Cielos y nueva Tierras; porque tanto gozo, los espectadores han sentido que ahora recrearán, en su Mundo, sin cometer errores, el Gran Escenario que Adam Kadmón les ha mostrado; pero eso Amigos, será la última Historia.

Concepto Rosacruz de los Arcontes devoradores de Luz

Cuando los Eones crearon, de su propio cuerpo, el Multiverso, solo pudieron llevar consigo una memoria grabada en forma génica y que sería utilizada, en primer lugar, para crear a los Legisladores, Arcontes, en quienes recaería la responsabilidad de construir mundos donde la Vida primero y la Consciencia después fuesen capaces de prosperar.

De algún modo, se podría decir que los Arcontes son la materialización de los designios originales de Adam Kadmón. Pero los Arcontes no son otra cosa que androides artificiales que manejan programas automáticos debidamente programados, con anterioridad, por los Eones, sus diseñadores.

En el transcurso de los primeros instantes de la formación del Multiverso, la materia que formaba la memoria génica de los Eones, los Arcontes, fueron agrupándose en torno a pequeños núcleos ígneos que habían surgido de las estrellas más grandes, como los grumos periféricos del cacao sobre la leche cuando esta se mueve en su recipiente con una cucharilla.

Los Arcontes, de este modo, se alimentaban del calor y de la luz que les proporcionaban sus anfitriones, tanto internos, el núcleo ígneo, como externos, los Eones sobre los que, los ahora planetas orbitaban.

En el transcurso de millones de años, según estaba programado, sobre la materia oscura y aparentemente sin vida de los arcontes empezaron a surgir las formas vitales que terminarían evolucionando hasta el Tipo humanoide, donde por fin los propios Eones prisioneros de su Eterno sueño pudieran tomar consciencia y evaluar la anómala situación en que se encontraba su diseño original.

Con el transcurso del Tiempo, esos androides, llamémoslos así, por inducción de las criaturas que ellos mismos estaban creando y alimentando, tomaron una especie de consciencia artificial, no propia ni auténtica; pero que les hizo ver que desde su origen estaban condenados a servir a la Vida e Inteligencia de otros Seres y que fueran los que a ellos mismos les habían formado.

Entonces decidieron que la única manera de sobrevivir era mantener dormidos a los grandes Titanes luminosos; pero para ello y dado que la Vida y la Inteligencia, en el Multiverso, era inevitable tenían que engañar a las Criaturas que ellos mismos alimentaban.

Mientras el Caos actual perviva, lleno de matanzas, luchas intestinas, crueldad, hambre y demás cosas que tomamos como naturales, más tiempo permaneceremos dormidas las criaturas que portamos el espíritu de los Eones y por lo tanto también ellos permanecerán autistas de lo que sucede en su entorno y propiciado por aquellas formas que fueran creadas para materializar sus propios designios.

Mientras más vorágine, ruido, producimos las Criaturas humanoides, más luz nos es arrebatada y más fuertes se vuelven los legisladores; pero por el contrario más nos debilitamos nosotros mismos, volviéndonos incapaces de recordar cual es nuestro primitivo origen.

Solo bajo estado de meditación y silencio mental absoluto, las criaturas divinas podemos ser capaces de sentir la voz interna de nuestro espíritu, herencia Génica de nuestro propio Eón, al cual pertenecemos y del cual formamos una parte importante y sustancial.

Solo entonces los Arcontes podrán ser desactivados, ya que al retomar nuestra propia Consciencia de la Verdad, ellos terminarán disgregándose pues se habrá llegado al término de su ciclo vital y se auto desconectaran como está programado desde el principio de los tiempos.

Los Arcontes no son ni buenos ni malos; pero su instinto de supervivencia está impidiendo que el Destino Final se precipite sobre este Multiverso y se pueda retornar al Pleroma, pues sus Dioses aún permanecen inmersos en un profundo sueño de eternidad insoslayable. Solo pido una cosa, que seamos capaces de darnos cuenta y despertarlos y ello solo se dará cuando nosotros mismos despertemos a la Verdad.

En L:.V:.X:. Luz, Verdad y Amor; que las Rosas del Alma florezcan majestuosas sobre la Cruz de vuestro Cuerpo material.


Aralba

jueves, 12 de marzo de 2015

Lección 55 (El Sol/ Concepto Rosacruz de los Eones del Multiverso)


Paz, Tolerancia y Verdad


19 (1+9=10=1+0=1) El Sol (El Renacimiento)

Un nuevo Eón ha surgido como consecuencia de la suma de todos los Eones del Cosmos. Todavía no ha penetrado en el Mundo Original, está en ello. Es nuevo porque aunque es la suma de Isis espiritualizada, la Naturaleza, y Osiris reconstituido, Adam Kadmón, con su consciencia plena. Es la suma de las experiencias que se han asumido tras recorrer inmensidades de periodos de tiempo en diferentes planos del Multiverso. Cada Eón era el Espíritu de dos almas gemelas con diferente polaridad. 

Podría decirse que ha Nacido una Criatura nueva que tiene todo lo que tenían sus padres pero algo más. Es Horus, el Gran Ojo cósmico, el Gran Ser que lleva en su seno lo masculino y lo femenino; pero limpio y sin mácula, nuevo, infantil. Atrás han quedado todas aquellas malas experiencias que han permitido sublimar lo basto y convertirlo en útil y pura herramienta para poder traspasar este Plano Cósmico.

Se enfrenta ante una última prueba, donde se juzgará si esa limpieza de su cuerpo es plena; pero mientras tanto, un júbilo inmenso recorre a todas sus partículas antes divididas, ahora unidas en un solo Ser. Horus ocupa toda Shambala. Ahora Shambala es lo único que permanece del Multiverso. 

La inmensa masa de energía que se encontraba distribuida en cada una de las estrellas del cosmos está condensándose en una minúscula masa de densidad cuasi infinita. Las Fuerzas de sus hermanos del otro lado tiran de él. La implosión ha comenzado y todo volverá a comenzar; pero de otra manera, ya que la experiencia acumulada por el Dios de Dioses le permitirá no cometer los errores del pasado.

Al contrario de lo que se piensa la gente, los Dioses no son perfectos, tan solo eternos. Nunca conocieron en el pasado un nacimiento, ni tampoco una muerte. Este Ser cuando regrese a casa sabrá lo que es vivir, gozar y sufrir. Conocerá lo que es pasar por la transición de la Vida y la Muerte una y otra y una multitud de veces más. Esta no fue una Obra Teatral como las que sus hermanos interpretan de forma habitual en el Mundo Eterno de los Dioses. 

El Dios ha tomado una nueva consciencia y que le era desconocida con anterioridad. Está a punto de dar el salto cuántico. Cuando ello suceda, todavía queda, nada quedará del escenario pero como nada es todo así compartirá con sus hermanos sus humanas y divinas experiencias.

Los Dioses del Mundo Original podrán conocer que todos sus actos tienen consecuencias y que de esos efectos pueden surgir criaturas sin vida propia y que hay que controlarlas. La falta de consciencia puede provocar la inactividad del Dios y de su inanición una nueva inconsciencia más profunda que convierte a los Dioses en Seres Fríos y que se mueven por inercia sin contemplar la equidad y la Justicia. Para que el Dios sea Justo tiene que poseer consciencia de sí mismo y de sus criaturas; Los Efectos, consecuencias de sus Actos.

Ya, Horus, el dios Niño, que es capaz de verlo todo lo de sí mismo y lo de sus innumerables partículas de Energía, mece en su seno con una nana celestial sus nuevas experiencias y por tanto una nueva memoria. Memoria, esta, que compartirá con sus hermanos tras ser reconocido como tal. ¿Qué te ha pasado Adam Kadmón?, le dirán. El contestará no me llaméis más así, aquel Dios murió, el que regresa del anfiteatro de vacío Cósmico es otro Ser. Uno que conoce la alegría y la tristeza. Uno que conoce la piedad y el sufrimiento de sus propias entrañas.

El espectáculo ha sido magnífico Horus, le dicen sus hermanos; pero debemos ser sinceros contigo y decirte que hemos sufrido contigo y también hemos reído. Vimos como pequeñas e inocentes criaturas de los mundos creados por tu organismo divino luchaban, con ferocidad, para poder sobrevivir. Todo eso, querido Horus, ha sido diferente a todo lo que conocíamos de toda una Eternidad que nunca tuvo un principio y jamás tendrá un final. 

Vimos tu sufrimiento y los hilos que te comunicaban con nosotros, por medio de los agujeros negros de tu Multiverso, nos transmitían esas corrientes eléctricas y nos hicieron llorar. Conocimos el llanto y sus lágrimas que caían de nuestros párpados. Conocimos la risa y las carcajadas de tus efímeras criaturas cuando disfrutaban de algo etéreo y temporal. Pasa, ya, la última Prueba Hermano y termina de regresar a nuestro lado. Comparte, con plenitud, tu Vida en ese oscuro Plano.

Concepto Rosacruz de los Eones del Multiverso

“La Sabiduría del Hombre es locura para los Simios” Cuando se produjo la implosión en el Pleroma, arrastró consigo a la Entidad colectiva Adam Kadmón hacia el interior de la Burbuja de vacío, la Nada, produciéndose una terrible explosión conocida por los científicos actuales como Big Bang. 

Debido a esto, Adam Kadmón se disgregó en una infinidad de partículas infinitesimales, neutrinos, que se dispersaron hacia todos los lados de la burbuja tridimensional por medio de la Fuerza Cinética producida. Esa Fuerza es conocida como Fuerza Centrífuga pues fue originada por una especie de remolino espiral.

En el mismo instante de producirse la explosión comenzó a transcurrir el Tiempo en el Multiverso; pero las partículas emanadas del Pleroma, vivas e inteligentes de Adam Kadmón y por propia afinidad, Fuerza Centrípeta, se fueron reorganizando en una especie de nebulosas de caldo cósmico que dieron lugar a los Cuerpos de Helio e Hidrógeno de los Eones del Multiverso. 

Cuando se produjo la disgregación material del Dios, también lo hicieron sus múltiples espíritus con sus respectivas almas eternas. Cada Eón del Multiverso, recompuesto en un cuerpo físico luminoso y de fuego, atrajo hacia sí a su propio espíritu dormido; pero las almas siguieron vagando, bipolarmente divididas, por el Cosmos recién formado.

Los Eones comenzaron a reunirse en cúmulos gravitatorios intentando reconstruir el Cuerpo original de Adam Kadmón y se formaron las Galaxias y grupos de galaxias. Alrededor de cada Eón dormido, ya que a su Espíritu le faltaban sus dos Almas, se agruparon diversos Eones de menor entidad que empezaron a gravitar, en forma elíptica, en torno al Eón principal de donde habían surgido. 

Producto de la explosión, también y como partículas de deshecho, se habían formado las Entidades que constituirían los Pilares del Multiverso y donde la vida pudiera surgir, los Legisladores o Arcontes; pero de estas Entidades puramente estructurales hablaremos en el siguiente capítulo.

Desde que comenzara este inmenso cataclismo, donde todas la entidades vivimos, no ha habido descanso por parte de los Eones que de una forma ciega vienen intentando reconstruir al Eón Original, Adam Kadmón; pero tampoco de parte de los Legisladores que para poder sobrevivir tenían que arremolinarse en torno a los Eones de menor entidad y por medio de la conocida como acrección, atraídos por su luz, la masa oscura y sin vida fue formando una especie de corteza en torno al fuego alimenticio del centro de los Planetas. 

Con el fin de intentar sobrevivir, como Entidades conscientes, los Arcontes vienen engañando a los dormidos Eones y provocando nuevas implosiones en estos, en forma de agujeros negros, que reproducen la burbuja original del primer Universo dentro mismo del Multiverso.

De este modo, se producen nuevos mundos tridimensionales separados del Universo primitivo. En cada uno de los Universos que conforman el Multiverso Eónico, los propios Eones que implosionaron en el Universo, primero reprodujeron de forma clónica, todas y cada una de las estructuras del primero. 

En su conjunto, el Multiverso tiene una apariencia de intestino o cerebro que se arruga y finta sobre sí mismo, en sí mismo, dentro de sí, con la única intención, planeada por los Arcontes, de que la materia oscura pueda distribuirse por todo el Multiverso de forma multidimensional y así impedir que la propia fuerza centrípeta, gravitacional, de los Eones dormidos provoque una nueva implosión en el Multiverso que haga regresar a Adam Kadmón al Pleroma de donde emanó.

Es por dicha causa, que los científicos actuales son incapaces de encontrar esa materia oscura que pudiera frenar la expansión del Universo. De no despertar los Eones, la expansión no tendría fin pues seguirían formándose burbujas de vacío, dentro de otras burbujas de vacío, donde los Eones, dormidos y sin memoria seguirían siendo ordeñados por sus propias criaturas, los Arcontes sin Espíritu; pero eso, lo saben los propios Legisladores, tendrá un final; pues el Multiverso no es infinito y sin dimensiones como sí lo es el Pleroma. El Hombre, nosotros, somos la Consciencia de una parte bipolar de los Eones. De nosotros depende que despierten de tan largo sueño.

En L:.V:.X:. Luz, Verdad y Amor; que las Rosas del Alma florezcan majestuosas sobre la Cruz de vuestro Cuerpo material.


Aralba

miércoles, 11 de marzo de 2015

Lección 54 (La Luna/ Concepto Rosacruz del Pleroma)



Paz, Tolerancia y Verdad




18 (1+8=9) La Luna (El Crepúsculo)

Cuando la luz se va, queda la oscuridad. Los Eones ya se han unido para formar el Único Ser que siempre ha sido. Los arcontes como entidades sin luz propia han fenecido; pero queda uno, el más grande, el Primigenio, cuya fuerza le proporcionara en tiempos remotos la Gran Sacerdotisa. El Gran Presuntuoso que se enseñoreó sobre todo lo Creado y se erigió en Dios único y absoluto, rodeándose de una cohorte de acólitos a los que vino a llamar ángeles.

Triste mira hacia atrás. Hacia la oscuridad pues ya no le queda nada. Incluso la Luz divina que robara durante tantos eones de tiempo sale de el/ella, a motu propio, atraída por el Gran Eón que pronto se encuentra a abandonar el cósmico escenario. Tuvo en sus manos el poder para crear cuerpos y que sus criaturas, divididas o no en sexos opuestos, pudieran extenderse por todo el Multiverso.

Sabe que su falta de Luz, cuando El Gran Eón único haya emigrado, hará que desaparezca para siempre de la faz de la existencia. Triste, no se sabe si arrepentido, el Gran Presuntuoso ya es consciente de que su reinado acabó y que muy pronto, hasta el/ella, dejará de Ser. En algún lugar, piensa mientras todavía respira, quede algo de la memoria de lo que durante una eternidad sucedió en este lugar que ya, pronto, dejará de ser.

Todas las marionetas que creara para confundir a las partes de Osiris desperdigadas por el Orbe, permanecen con ella. La Mar y sus criaturas. Todo surgió de María. Todo morirá con su Memoria cuando ya no exista luz de Eones que devorar. Machos y hembras, de agua o de tierra, de aire o extraterrestres de otros planos y dimensiones. Ya, los agujeros negros que comunican con el Mundo Original están llamando a sus hermanos. Oscuridad parecen en el Plano del Gran Presuntuoso; pero en verdad, Luz Pura son, llamando con ardor a su Hermano Osiris reconstituido.

El Espíritu de Isis, la María Celestial, el Espíritu de la Gran Sacerdotisa que propició el nacimiento de la Gran Madre Gaia, ya no está a su servicio pues Osiris la reclamó para sí y como no podía ser de otro modo, ella ya marchó rauda al encuentro con su Amado. Solo queda una triste sombra de lo que otrora pareciera ser una imponente divinidad. Ahora todos conocemos como fuimos conocidos y el Gran Presuntuoso se encuentra desnudo e inerme ante la mirada del Dios, constituido de muchos dioses, que lo mira de forma indiferente. El Dios no posee en su Corazón capacidad para la pena o el desprecio.

El Crepúsculo de los dioses ya está aquí, se dice, mi pensamiento vuela, se volatiliza atraído por otras esferas de poder. Ya pronto no seré y me pregunto si alguna vez, en algún instante, he podido ser algo más que el pensamiento de algunos de esos seres cuya Luz devoraba con deleite y fruición. Nadie quedará aquí para recordarme. Nadie que adore mi recuerdo como me adoraron multitudes, mientras estuve gordo y frondoso de luz prestada. Lo que se presta hay que devolverlo y ha llegado el momento cósmico para hacerlo; pero lo que lamento es que yo soy ese préstamo. Todo mi Ser, porque aquí no podrá quedar nada, ni tan siquiera el aparente vacío Cósmico que será fagocitado por el Gran Eón y trasladado al mundo de donde vinimos.

Ya entra en sueño el Gran Presuntuoso, esperando el Día de su Juicio. Osiris rescatará de su Ser todo, como no puede ser de otro modo. No porque Osiris sea majestuoso y benevolente sino por propia Ley Divina. Nada se Pierde, porque la Nada, como la entendieron en el Multiverso, jamás ha existido. El Gran Presuntuoso, el/ella, su memoria va perdiendo mientras un hilo de Luz se dirige hasta Osiris que presto está a abrir el Portal de regreso a casa.

Hilos de Luz negra roban la luz a la Gran esfera arcóntica, al gran Demiurgo del Multiverso. Pero no es robar cuando solo se recupera lo que siempre ha sido tuyo. Las estrellas, Eones, caen unas sobre otras. Primero unas pocas, después cientos, miles millones, cientos de miles de millones. Ya está Osiris conformado, reconstituido en todas sus partes. Ya no hay Legisladores.

Concepto Rosacruz del Pleroma

En principio, quiero solicitaos un pequeño ejercicio de olvido. Para entender lo que es el Pleroma, intentad olvidar todo lo que aprendisteis en la escuela. Olvidad también la lógica. ¿Hecho? Vamos a ello.

Imaginad por un instante que solo existe una gigantesca esfera, sin límites y en cuyo exterior no hay nada porque ese, hipotético exterior, tampoco existe. No hay nada más que un inmenso Mar poli dimensional de un fluido dorado constituido por infinitos midiclorianos, neutrinos mondos y lirondos. Si intentásemos comprender lo que allí sucede, solo alcanzaríamos a ver caos; pero es solo una limitada interpretación de la aún más limitada mente humana. Cada una de las partículas íntegras que conforman el Pleroma son un Eón y todas ellas se entremezclan entre sí como si de agua dorada se tratara.

Todos los infinitos Eones que conforman el Pleroma, han existido siempre pues nunca tuvieron algún comienzo. Nada ni nadie los creó jamás; por lo tanto el Tiempo, tal y como lo conocemos, allí no transcurre. Todos ellos son seres inteligentes que comparten un cuerpo mutable y una mente común. El Pleroma es el Origen Eterno de donde surgiría, en algún momento, el Multiverso que hoy en día conocemos. No deberíamos, aunque nos inclinásemos a hacerlo, llamarlo Dios, ni Cielo, ni otra cosa parecida, ya que nosotros mismos estamos formados por partículas organizadas del propio Pleroma y en todo caso, podríamos llamar a sus habitantes como hermanos originales o primigenios.

La materia fundamental del Pleroma es el Éter, aparentemente intangible, aparentemente invisible y aparentemente inmedible; pero en el Éter no hay Espacio vacío, sino una infinitud de neutrinos que se mueven, de forma anárquica. Un anarquismo que no es tal; pero que nuestra limitada inteligencia actual es incapaz de comprender su constitución. Debemos entender, de una vez y para siempre, que el Pleroma, como un unitario colectivo, no solo no reclama para sí algún tipo de adoración sino que la rechaza pues no es algo propio de su Naturaleza. Hubo un momento en que algunas partículas del Pleroma decidieron realizar una burbuja interior de vacío. Es evidente que si no existe el afuera solo pudo ser adentro.

Para el Pleroma y todos sus infinitos habitantes, lo que aquel Eón, conocido como Adam Kadmón, realizó era algo novedoso y que jamás había sido hecho con anterioridad. Cuando el Eón penetró en la burbuja de Pleroma se produjo en ella una implosión y como consecuencia una explosión dentro de la novedosa burbuja que arrastró, en una cósmica vorágine, a múltiples Eones que se desmembrarían dentro de esa Burbuja justo en el primer segundo después del Big Bang del Multiverso dando lugar a lo que se conoce como Espacio Tiempo. Como ese Universo múltiple no puede subsistir por sí mismo, sino que necesita del Pleroma, se mantiene unido a él por medio de una especie de cordones umbilicales que unen a algunos Eones con el propio Pleroma. Esos nexos de unión no son otra cosa que los agujeros negros cósmicos.

Cerca de esos vórtices de oscuridad total, vista desde nuestro lado en el Multiverso, se encuentra lo que se conoce como horizontes de sucesos, donde aparentemente y desde nuestro particular punto de vista humano, no parece existir el Tiempo. El Tiempo se detiene, no circula. Esos lugares de transición que no podría decirse que pertenecen a nuestro Plano; pero tampoco al Pleroma de donde todo emanó, son los mundos de Shámbala; donde una multitud de Eones, Hermanos nuestros, intentan evitar que la implosión del Pleroma continúe. Por el contrario, intentan hacernos despertar para que comprendamos la situación actual de la Humanidad y de sus hermanos menores, la Naturaleza en su conjunto.

Logrando su Sagrado Objetivo, conseguirán, gracias a la Magia o Ciencia Sagrada, que todo retorne a su origen y la Burbuja que otrora recreara Adam Kadmón, se repliegue hasta su punto de origen. Entonces los Eones que un día emanaron retornarán al Pleroma; pero con nuevas y magníficas experiencias; pero por favor, intentemos comprender la naturalidad de todo y no adoren a unos dioses del todo inexistentes.

En L:.V:.X:. Luz, Verdad y Amor; que las Rosas del Alma florezcan majestuosas sobre la Cruz de vuestro Cuerpo material.


Aralba