"La Iglesia Gnóstica 2"
-Páginas 4 a 11-
En la Iglesia Gnóstica, así como en todas las Religiones existe un Libro Sagrado o Biblia, que integra el conjunto de todas sus enseñanzas y Doctrinas; pues así, del mismo modo, los Gnósticos, dentro de nuestra Iglesia, disponemos también de un Libro Santo, y haciendo algunas referencias acerca de él quisiera comenzar con mi estudio, advirtiendo, no obstante, que para comprender a los diferentes autores, habría que considerar tanto la época como el sentido esotérico con y cuando fueron escritos.
Lo que es el Talmud para los Semitas, el Bhagavad-Gita para los hindúes, el Corán para los Musulmanes y la Biblia para los Cristianos, es para nosotros la PISTIS SOPHIA. Veamos, pues, en síntesis, lo que acerca de ella dice un Historiador y veremos que Pistis es Libro y Entidad Espiritual a la vez.
Se trata, del libro Cumbre de todas las Doctrinas Gnósticas, el cual fue publicado en Latín el año 1851 por Schwartze y Petermann, con arreglo a un Código del Museo de Londres, llamado Askeniano, cuya vejez se remonta al siglo III, aunque algunos opinen que fuera en el Siglo V.
(Opus Gnosticum Valentino adjudicatum est Códice manuscripto Cóptico Londinensi descripsit et latine vertit M.G.Schwartze). El original Griego de ésta Obra, que sirvió de base en los primeros siglos, no ha podido ser hallado. Sólo se tiene el texto Sahídico, que es una traducción al Copto del Manuscrito Primitivo. El Papiro Copto, en cambio, fue encontrado en Egipto sin que nada pueda atestiguar si el Original Griego fue compuesto, asimismo, en este Pueblo.
En lo que sí concuerdan todos los Críticos, es en que está Obra proviene de algunas de las múltiples Escuelas o Sociedades Gnósticas Primitivas, creyéndose más bien que pertenecería a los Ophitas. Se divide en 148 Capítulos y en cuatro grandes partes o libros. El primero y el Cuarto, no llevan inscripción alguna, mientras que el Segundo es encabezado por este título: Segundo Libro de la Pistis Sophia. Lleva también un rótulo al final que dice: "Parte de los Volúmenes del Salvador".
Este mismo rótulo vuelve a repetirse al final del Libro Tercero que figura sin encabezamiento. Esta falta de homogeneidad, es la que hace suponer a algunos Críticos que la Pistis Sophía no está compuesta con arreglo a un plan unitario y que la mayor parte de sus escritos sean de épocas distintas. Por dicha causa, aseguran que el Libro Cuarto es más antiguo que los restantes.
Al redactarse esta Obra, se supone que han transcurrido once años desde la resurrección de Jesús y lo describe razonando con sus discípulos en el Monte de los Olivos y dándoles a conocer las grandes y supremas Verdades Iniciáticas.
Por el vestido de Luz que le rodea, ha podido atravesar el Mundo Suprasensible y remontándose de esfera en esfera, le han sido franqueadas todas las puertas, amedrentando a los mismos Arcontes o Guardianes de aquellos Lugares, quienes le han adorado...
Jesús arriba al plano donde están esos Arcontes o Señores Tiranos, cuyo Príncipe es Adamas "Authades el Gran Presuntuoso". Ellos vienen a ser los dueños del Destino(*).(*) Los Señores del Karma de los Teósofos; pero Jesús, provisto de su habitual heroísmo, llega al Eón 13 en donde se encontraba estacionada primitivamente la Pistis Sophia, y en relación con esto, cuenta a sus discípulos la Historia de este Ser Misterioso que, pretendiendo llegar a la Región de la Luz Suprema atravesando los 12 Eones, sale de su morada limitado por el Eón 13 y al ascender en su vuelo, es arrojado por los mismos Arcontes en la inmensidad del Caos.
Tal es la triste situación de la Pistis, hasta que el Padre le envió a Jesús como Libertador...Jesús, entonces, apela a Gabriel y a Miguel para que la lleven en sus manos con el fin de que ninguna de sus partes se pierda en las Tinieblas, y así es trasladada desde el Caos hacia un lugar que se encuentra bajo el Eón 13. Por fin, después de una lucha cruenta, Jesús despoja a los Arcontes de su Luz y la Pistis Sophia es conducida al Sagrado Lugar, donde mora desde entonces con todos sus hermanos invisibles, "el resto de los eones"...
En la Historia de la Pistis Sophia, el relato se interrumpe repetidas veces con el recitado de varios himnos que ella hacía llegar del Caos a la Luz. Estos son las 13."metanoias", y cada vez que Jesús recita, invita a uno de sus discípulos, a dar su explicación.
Con frecuencia hablan las Santas Mujeres, María o Salomé. Otras veces algún Apóstol, como Andrés, Pedro, Mateo o Felipe, los cuales interpretan los himnos de la Pistis aduciendo a algún Salmo de David o Salomón.
Es característico de los Gnósticos Coptos, el no ir a buscar otra Autoridad para confirmar sus Escritos que las propias Sagradas Escrituras, y si algún sincretismo se observa en ellos, es más en la forma que en las ideas.
Después, se trata en este libro, de la suerte que espera a las almas más allá de la muerte revelándonos lo que acaecerá a cada una de las distintas Categorías de Hombres. Las Alegrías y Privilegios que aguardan a los unos y los Tormentos y Penas que afligirán a los otros.
Su tema principal es, pues, la Redención de las Almas... En la Primera parte se ocupa, de la suerte de las Almas privilegiadas, es decir, de los Apóstoles, de las Santas Mujeres y de los Perfectos o Iniciados que habían hecho renuncia de la materia y de los cuidados del Mundo.
En la segunda nos revela, el destino que se reserva a las otras Almas, especialmente, a las que se arrepienten de sus pecados. Luego viene otra parte, en la que se trata de los Misterios y de su eficacia y, finalmente, se llega a aquella en que se describen las penas de los condenados...
Veremos más tarde que LOS MISTERIOS son lo principal y todo lo demás gira alrededor de ellos.
En el Libro Cuarto se habla de la Resurrección de Jesús, quien, se dice, ha vencido a los Arcontes del Destino y la Fatalidad cuya sombra nefasta dejará de pesar en adelante sobre los Hombres.....
Aquí refiere Jesús a sus discípulos las hazañas de estos Arcontes, hijos de Adamas, que, persistiendo en su afán de procrear, dieron lugar a los Arcángeles, Angeles, Liturgos y Decanos hasta que intervino Jeú, a quien Jesús le llama PADRE DE MI PADRE.
Jabraoth Adamas, "El Gran Presuntuoso" y los suyos, se obstinaron en su pecado por lo cual Jeú los ató a la Esfera en donde actualmente forman parte del Zodíaco, viniendo a ser estos Arcontes del Destino, los que tiranizan a los Hombres y cuyos pasos trata de investigar la Astrología...
Aún continúa la descripción de la manera torturante como los Arcontes penetran en los Hombres y los incitan al mal, atrayendo sobre ellos terribles castigos y perdición absoluta....
***
Hasta aquí, cuanto se piensa profanamente y se percibe de las Enseñanzas de este Libro Sagrado sobre el que Historiadores e Investigadores no pueden profundizar más por la falta de Claves.
Pistis para nosotros significa Fe, pero no nuestra Fe habitual "Creencia" que resulta de la aceptación de una opinión extraña, que se cuenta. No. Fe en el sentido bíblico es una Fuerza, es la fuerza mágica, que basta tener como un grano de mostaza, para levantar una montaña y echarla al mar.
Sofía ya sabemos que es ciencia, "Sabiduría". De manera que Pistis Sofía es el 0oder de la Ciencia "La Sabidur8a de la Fe", es teurgia, magia blanca, cuya clave naturalmente no se puede dar en este libro sino que se da por cursos secretos que pueden ser proporcionados por el Autor. En esto está la diferencia capital con la teosofía hindú. Aquella es teoría y muchos son hasta contrarios a la práctica de la Magia.
El Gnóstico exige primero el manejo de Pistis, "de la Fe o Conocimiento Interior" y luego la comprobación de los hechos. Es, pues, ante todo, práctica, real, efectiva, sin nada de especulaciones a priori.
Es racional y justo que algunos Críticos supongan, por la falta de concordancia y homogeneidad de sus partes, que esta Obra no fue escrita con sujeción a una unidad y a un plan preconcebidos, pero esto se debe, a que en la Traducción de Schwartze y aún en el Códice del Museo de Londres, solo existen fragmentos que indudablemente dejaron esparcidos algunas de las Primitivas Escuelas Gnósticas.
El Libro íntegro, intacto, el verdadero Original Griego, tal como se escribió y con toda pureza de enseñanzas, está en poder de nuestra Santa Iglesia Gnostica, como reliquia esotérica, que no se da a conocer más que a aquellos que están en condiciones de recibir, sus profundas y claras verdades...
A nosotros tuvo que venir necesariamente, y es nuestro Patriarcado el fiel guardador de tan preciada joya. En esta Obra Sagrada, están condensados todos nuestros Rituales.
He aquí por qué la crítica Histórica, no puede hablar con más acierto de la que en todo tiempo ha sido la Biblia Sacra de los Gnósticos. La vida moderna ofrece un peligro grave. Se trata de que la humanidad pierda lo humano y se vuelva máquina.
Este peligro es tanto más inminente "cuanto más se trate de matar la personalidad" como procura la Teosofía, tanto de Oriente como de Occidente, y la única salvación sólo podemos encontrarla en el Cristianismo Esotérico que trata precisamente de salvar él YO. Véase, si no, el Apocalipsis de San Juan. Un YO fuerte y potente y con los adelantos de la técnica, será el eje y el norte de la humanidad del Porvenir y todo lo que trate de poner obstáculos a este avance debe ser combatido. En las Oraciones bien sentidas, vibra la sustancia de Cristo.
Los siete Rishis sagrados, enseñaban a sus Discípulos a orar como sigue: Tú, Ego solar, que eres la base de todo amor, penetra en mí, ilumíname y hazme progresar porque, sin ti, Logos Solar, nada puede tener existencia...
Los Rishis, que fueron los que enseñaron los grandes Mantrams de la iniciación de Zaratustra hablan también de la sustancia Solar que es Dios en sí.
Francisco de Asís, ora en su montaña sagrada diciendo: "Loor a ti, Oh Señor, con todas tus criaturas y sobre todo, a nuestro hermano el Sol. Él labora y TU, Señor, EL QUE ALUMBRA EN ÉL. Él es hermoso e irradiante como símbolo tuyo, Oh Altísimo".
Cuando en la Edad Media se leía la parte del Evangelio que dice: Yo soy el Pan de la vida, el Sacerdote miraba hacia el suelo, Luego, al decir: Yo soy la Luz de la Vida, miraba hacia arriba y, finalmente, cuando decía: Yo soy la puerta, miraba hacia el frente...
Uno de los pintores iniciados, es también Durero. Basta examinar sus trabajos sobre el Apocalipsis. Las obras EL CABALLERO PASANDO ENTRE DIOS Y EL DIABLO, LA TRINIDAD Y LOS SANTOS bien claro lo manifiestan.
Sobre el símbolo de la Cruz, ya nos habla Platón diciéndonos que significa la Tierra Material a donde el alma desciende para ser crucificada y poderse convertir en espíritu. Pero es bien curioso, que la Cruz de Platón esté tendida, mientras que la de Cristo ya se ha levantado con su cabeza en alto. He aquí una diferencia notable.
Los Orientales toman, para sus Oraciones, una posición difícil de imitar por nosotros en la que esconden los pies para que la corriente terrestre no pase a través de ellos. Quieren evitar la realidad de la tierra y hacer en sí una abstracción para ser sólo mundo suprasensible, fuera de los sentidos. Los Occidentales, en cambio, al mismo tiempo que elevamos nuestras Oraciones a lo invisible, a lo alto, a Dios, doblamos la rodilla para recibir la corriente terrena, pues solo en la conjunción armónica de esos dos mundos se encuentra la Luz, la Iniciación, la Redención...
Pues bien. La Iglesia Romana se mantuvo siempre mediante sus intereses creados y su forma intolerante comenzó cuando comenzaron sus negocios materiales. Igual está sucediendo hoy con la Sociedad Teosófica en Inglaterra, Australia, estados Unidos, etc., a causa de sus propiedades literarias, sus inmuebles y demás bienes.
Hasta en España, hay intereses editoriales y no conviene que el Teosofísmo cambie de rumbo o tome otra orientación por esta circunstancia. Pero éstos sólo son casos aislados, aunque se trató de desacreditar al movimiento Rosa Cruz con motivo de nuestro viaje a América y ello sirvió, más bien, para dar más éxito a su Empresa. El estudio de los problemas gnósticos ha de llevarnos a conclusiones definitivas, haciéndonos aparecer toda la Obra Teosófica de ayer como infantil y preliminar.
Ya que las cosas están así, nuestra pretensión se limita a que nuestros Hermanos Teósofos no se encierren en un círculo de intolerancia. Pueden seguir, como nosotros, perteneciendo siempre a la Sociedad Teosófica, pero justo es que estudien también nuestras Obras con todo detenimiento, ya que en ello no pierden nada y es bien posible que nuestras enseñanzas les preste un nuevo alborear. Ya que no quisimos que en América se tocara el punto sexual ni se mencionara el Gnosticismo para darle mayor amplitud en este Libro de la Iglesia Gnóstica, hoy ya lo ofrecemos a la consideración de nuestros Lectores.
Por él observarán todos, que nuestras ideas Rosa Cruz Gnósticas ofrecen un positivo adelanto y buena prueba pueden dar de ello la multitud de Teósofos y Espiritualistas que, sin abandonar su propia filiación, nos vienen siguiendo. ¿Ofrecen nuestras enseñanzas materias para una controversia? Nuestra Revista está disponible para todos aquellos que quieran exponer libremente su criterio que será bien acogido.
Por otra parte, como el Gnosticismo y el Libro de la Iglesia Gnóstica requieren una mayor amplitud de explicación, porque todos no son igualmente comprensivos, un Teósofo que está afiliado a nosotros y que siempre se distinguió por su liberalidad, hoy Nuncio Apostólico de nuestra Iglesia, irá a América a ponerse a las órdenes de las Aulas, Ramas y Centros dónde hablará sobre estas materias en sus puntos de contacto con las ideas Rosa Cruz.
Los Gnósticos admiten también las sagradas escrituras de los cristianos. La Biblia cristiana, como veremos más tarde, tuvo sus intérpretes en los Gnósticos y para dar un ejemplo veamos algo del Apocalipsis de San Juan (*). La parte esencial de magno Libro Bíblico, ha sido ignorado siempre por la aberración de la Iglesia Oficial que no ha hecho otra cosa que transitar por las capas externas de las Escrituras. Sólo las Sectas "evangélicas" estadounidenses, se han ocupado activamente de su interpretación, pero haciéndolo, unas veces, sin marcada mala fe y otras con supina ignorancia...
Ya los Gnósticos, desde tiempos remotos, dan sobre este particular una clara explicación tan bella y sublime, que es lástima que la Iglesia Católica se haya apartado de este luminoso camino. En el Versículo Sexto principia el Santo de la Revelación, diciéndonos que nos han hecho Reyes y Sacerdotes, pero no pobres pecadores como acentúa en todo instante la Iglesia Católica. Es decir, Reyes y Sacerdotes que son los que mandan y enseñan ....
Jamas Pintor alguno ha concebido cuadros de más hermosos relieves y es preciso, para leer este sagrado Libro, no hacerlo con pavor, con el temor del día que vendrá, sino con espíritu amplio, pleno de un verdadero sentimiento artístico. Todo Gnóstico debe de ser, pues, un sobresaliente, rey y sacerdote y nuestras enseñanzas nos llevan a cumplir con esa posición.
Una Clave para hacer más comprensible el Apocalipsis, nos lo da el Fausto de Goethe, porque las obras Iniciáticas tienden, entre sí, a explicarse y complementarse. En el Fausto, encontramos un doble aspecto de Mephistófeles. En la primera parte, aparece este Genio, manejando a su antojo las pasiones individuales y en las segundas las colectivas. Primero hace sus víctimas entre personas aisladas y por último a toda la Humanidad. En el Apocalipsis encontramos, asimismo, estos dos aspectos del Satanás y Arimán. En el capítulo 13 habla de dos animales o bestias. La primera, salida del mar que tenía siete cabezas y diez cuernos y la segunda brotada de la tierra mostrando dos cuernos semejantes a un Cordero. Estos dos animales, representan nuestros mundos. El Físico en el que habitamos naturalmente y el espiritual de donde procedemos y al que hemos de regresar, aunque durante nuestra vida esté latente dentro de nosotros.
Al descender el Hombre desde su Mansión Celestial del Mundo del Espíritu al plano Físico, comienzan a luchar entre sí esos dos mundos, esos dos principios en nuestro interior, pero como la diversidad de tentaciones, de vicios y de errores es tan múltiple, surgen siempre con distinta cabeza...
Nunca el problema humano es igual para dos personas, pues así como nunca existen dos caras iguales, no es posible, que puedan existir dos problemas internos de igual condición. De aquí que cada uno requiera una resolución bien diferente.
Para encontrar, en realidad, la solución al problema de cada uno, necesitamos LUZ Y RAZON, pero hay una gran herida con la que se debe de contar, "la herida de la ignorancia".
En el Capítulo 17, se hace mención a esa misma herida que sana poco a poco a medida que vamos recibiendo Luz y Sabiduría. Hay siete Montañas, lo mismo que en la Blanca Nieves que habita con sus gnomos. La Reina se miro al espejo y le pregunta: ¿Quién es la más bella en todo mi Reino? Y el espejo le responde: Tú, pero Blanca Nieves, que habita con sus enanos en las siete montañas, es aún más bella...
Ésto simboliza que ese otro mundo, donde aparece estar Blanca Nieves, el mundo espiritual, es aún más bella. Este problema es el mismo del Castillo de Klingsor y del Santo Graal.
La Ciencia y la Sabiduría se encuentran en una lucha constante. Esa eterna lucha dual entre el mundo físico y el mundo del espíritu. Surge luego la Gran Ramera, Babilonia la Grande, la madre de las fornicaciones y de las abominaciones de la Tierra, la de nefasta condenación. Es ella, la que representa en el aspecto físico, la Política, el Imperialismo egoísta, el Bolchevismo, el Comunismo, las escuelas Filosóficas, todo aquello que tan lamentablemente nos hace perder tiempo- como lo perderíamos con una Prostituta- sin ocuparnos del Mundo Espiritual que es nuestra verdadera morada. Esa Ramera, es el tinte grosero y material que tiene todas las cosas en oposición al espiritual. Es esencial conocer que habitualmente la utilizamos y cohabitamos con ella sin saber quien es...
Así hacemos uso de la Electricidad y la manejamos, aunque nadie pueda decirnos lo que es en sí. Si estudiásemos el mundo de las Causas y el aspecto espiritual de todo lo existente, llegaríamos a saber lo que es la electricidad y cuántas maravillas podríamos hacer con ella, cómo llegaríamos al descubrimiento de muchos obscuros problemas que hoy inquietan a la humanidad. Y es tan sencilla la Electricidad, que no tiene otra fuente que el Sol mismo, pues el carbón, el aceite y el petróleo, no son más que plantas del pasado que se saturaron plenamente de SOL y que ahora extraemos de su prisión ofreciéndonos esa energía condensada y oculta. Una piedra y un pedazo de hierro, pudiéramos decir que son cosas muertas, pero si las golpeamos fuertemente entre sí, entonces brotan chispas. Este fuego, es la parte espiritual, la materia radiante escupiendo materias ígneas. Es un proceso alkimista instantáneo el que se produce y los Rosa Cruz Gnósticos estudiamos atentamente ese fuego vivo que surge de la piedra que como causa, tiene la substancia del Logos Solar o Cristo, que es a su vez la causa de todo.
Los dos estados, mencionados anteriormente, están representados hoy por Roma "la Iglesia Católica" y Rusia "el Comunismo de la Unión Soviética". Dos animales o bestias apocalípticas....
Pero detrás de ellos, está indudablemente nuestro Mundo Espiritual que es el único y con el que podemos justamente revolucionar el Mundo. Y volviendo al Apocalipsis de San Juan, diríamos que solo los Gnósticos tuvieron el acierto de darle su debida interpretación como lo prueban, las sencillas, pero contundentes explicaciones que nos legaron, y que hoy podemos aplicar a nuestra época. Ya que antes mencionamos a Roma y a Rusia, para sintetizar estos dos aspectos personal y colectivo de que veníamos hablando, pongamos el ejemplo del Fascismo y del Comunismo. El Fascismo, pretende encontrar la salvación, concentrándola en una solo Hombre, en una personalidad francamente conservadora, que devuelve al Papa sus temporales dominios.
El Bolchevismo, desconoce en absoluto la personalidad y rechaza hasta el sentimiento religioso. Como resultado infalible de ambos, está el Hambre y la Miseria amenazando por todas partes. En otro sentido, la India representó también el Comunismo Religioso en su día y quiso acabar con la personalidad, matando él YO. Sin embargo, en la Gnosis renaciente, vemos una especie de Fascismo, aunque en diverso aspecto, que no se conforma con esperarlo todo de un solo individuo, sino que pretende hacer de cada uno un Mussolini, una personalidad consciente, Rey y Sacerdote, ya que no nos dice el vidente JUAN, que Dios hizo un Rey y un Sacerdote. Lo que afirma, es que Dios hizo a TODOS Reyes y Sacerdotes. Es este un verdadero e interesante programa que llevar a la práctica para que todo Ciudadano sea un Rey, un Sacerdote, un Hombre que sepa mandar y bendecir.
Las siete cabezas del monstruo apocalíptico, representan el SEPTENARIO que desde remotas edades fue aceptado en la India por Germanos y Gnósticos.
En el mismo Capítulo 17 hace referencia Juan al misterio del sexo cuando observa las maldiciones que han de caer sobre él por los actos de fornicación y entonces dice: Y el Ángel me pregunto: ¿Por qué te maravillas? Yo te diré el misterio de la Mujer y de la Bestia que la trae, la cual tiene siete cabezas y diez cuernos. Vemos en esto, la duplicidad, los dos aspectos del mundo material con sus pasiones y del mundo espiritual con sus virtudes, mientras que las siete cabezas simbolizan los siete cuerpos o estados del ser.
En el Capítulo 6, se habla de cuatro sellos que representan al cuaternario inferior, por el cual ha tenido que pasar la Humanidad haciéndose camino a medida que iba rompiendo esos sellos. Cuatro animales que influencian los cuatro cuerpos inferiores por los doce signos del Zodíaco, representados doblemente por los cuatro Ancianos, ya que en todo existe la misma dualidad.
Hay que tener en cuenta, que disponemos de un Zodíaco espiritual y de otro material. El primero está en relación con el principio químico y el segundo con el Eter de Luz, o lo Tatwas. El Caballo Blanco, nos habla de la inspiración que tuvieron los Antiguos en épocas ya fenecidas. El rojo, indica la época de hierro, las armas, el egoísmo. El negro, es la Ciencia y el pensamiento material, la balanza de la justicia que hoy representa el querer que todo se deslice con peso y medida material. Hay un último caballo sin color...
Este es el Tatwa, donde todo estado es indefinido. Habla de la vuelta del Cristo, pero dice que vendrá como un ladrón en la noche...
Así es la Sabiduría. Ella se acerca y regresa a nosotros, como regresó Parsival, no quedándose en el Castillo de la Ciencia de Klingsor, sino abordando como un ladrón el Castillo del Graal. Ya en el Graal, es conquistado nuestro verdadero YO, porque nuestro Yo habitual, "la Personalidad" es una simple caricatura.
Describe la mujer con un cinturón o escrito sobre el muslo el nombre de Rey de los Reyes y Señor de Señores. No está el REY en la frente sino en el muslo... He aquí el Misterio sexual.
En fin. Todo el Apocalipsis, es perfectamente explicativo por medio de las cosas naturales, pues es un absurdo, como creen los fanáticos, pensar en una nueva venida material del Cristo...
La Jerusalén divina, es un estado espiritual, el mundo invisible. Luego, no hay que olvidar, que vivimos en dos mundos distintos, el astral y el material...
En el primero hay Angeles maestros que cuidan de nosotros cambiándose por épocas. Así, por ejemplo, en la Unción Eucarística gnóstica están las Huestes de Uriel, en Verano. Las de Miguel, en Otoño y las de Gabriel, en Invierno. El Sacerdote debe invocarlos en esas épocas.
En el Capítulo 20, se habla de un Angel, que desciende del Cielo, trayendo en su mano UNA LLAVE Y UNA GRAN CADENA como diciéndole a la Humanidad que elija entre la Cadena de las Religiones que amarran al YO y la llave que da el Gnosticismo para obtener la ciencia "libertadora" del YO. También se habla en ese Sagrado Libro, del reino de mil años y del Anticristo, lo que da lugar a que mucha gente se encuentre en situación expectante de esa época anunciada que vendrá llena de Paz y de Luz. Pero dice también la Biblia que antes que ella principie con sus mil años, el diablo será soltado...
Pues bien. Ahora estamos precisamente con el Diablo suelto, EL ANTICRISTO, LA CIENCIA MATERIAL, FRENTE AL Cristo verdadero, frente a la
Sabiduría Cristiana. Ya pasó ese tiempo que muchos esperan y la Naturaleza va siguiendo su curso.
Los doce hijos de Jacob del Antiguo Testamento, representaron las doce épocas en que las influencias zodiacales fueron netamente físicas. Los doce Apóstoles, las influencias zodiacales de la época astral, en que estamos ahora y, por último, vendrán doce Angeles que representarán la edad que se acerca....
En el final se dice como una síntesis. Yo soy el Alpha y la Omega, es decir la A y la O, el Principio y el Fin. Al que tuviere sed, yo le daré de la fuente de la Fuente del agua de la vida gratuitamente...
Yo soy el Alpha y la Omega. Bienaventurados los que laven sus vestiduras (los siete cuerpos) en la Sangre del Cordero, (en la substancia solar, en los equinoccios de Primavera), para que se entren por las puertas de la Ciudad...
Luego, como consecuencia de que este cumplimiento, se acerca, viene nuestro Ángel, para lograr la conexión con ÉL, que es el objeto de la Iniciación, y entonces se verifica el desposorio, la unión de un mundo con el otro y ÉL llega presto con su galardón, para recompensar a cada uno. Mas, ay de aquel que mate su YO en las horrendas voluptuosidades, perdiendo las benditas emanaciones del Logos! Para esos, para los fornicarios, dice el Capítulo 21, su parte será en el lago ardiendo con fuego y azufre, que es la muerte segunda....
Por eso nuestro deber, para recibir el beneficio de la edad próxima, es fortalecer y conquistar al YO. YO SOY cuando SOY CRISTIANIZADO "la cristificación", es decir, bañado en el Logos solar en la Substancia Crística y esa substancia es la que hay que hacer florecer impulsándola desde el fondo de la semilla, para que rompa la cáscara que la envuelve con su prieta dureza.
Repasaremos algunos autores de los primeros siglos. Orígenes nos cuenta, que aquel Gobernador de la Judea, llamado Pilatos, después de haber lavado sus manos como símbolo de su propia ignorancia por la culpabilidad de Jesús, mandó poner sobre la Cruz del Gólgota el Histórico rótulo que conoce la Cristiandad del INRI, redactado en tres idiomas distintos, Hebreo, Griego y Latín. Esta triplicidad de Lenguas que, a simple vista no parece necesaria, fue empleada por el Magistrado Romano en determinado sentido y como si quisiera dar a entender al Pueblo Judío algo que no estaba a su alcance y que no pudieron comprender las masas sedientas entonces de la Sangre del Redentor.
Sin embargo, ello encierra esotéricamente algo muy importante, que es, en verdad, de un gran valor simbólico. Los Griegos, dieron a conocer los Misterios. Los Hebreos, las Escrituras y la Kábala y los Romanos, basados en esas dos columnas, comenzaron una nueva época de transformación...
El Puente que da acceso del Antiguo al Nuevo Testamento, lo forma el Evangelio de San Mateo, que fue el único escrito en Hebreo. Todos los demás lo fueron en Griego. También el Antiguo Testamento, en su arte Septuagésima, "la Septuaginta" fue realizada en Griego.
El Griego y el Hebreo, son dos idiomas completamente distintos en el sentido ideológico. He aquí por que se encuentran tantos errores en las Traducciones Bíblicas que, a su vez, dieron motivos más que suficientes para que existiera aquella tirantez y aquellas luchas encarnizadas que sostuvieron los Gnósticos y la Nueva Secta Cristiana. Los Primeros, los primitivos, exigían la aceptación de la Biblia en su genuina escritura Griega y los Neocristianos disconformes, la mandaron redactar y componer a su criterio en latín.
Hoy los Gnósticos modernos, estudiamos esas diferencias que constituyen investigaciones muy amenas y de sumo interés.
Extraído del Libro "La Iglesia Gnóstica" del Dr Krum Heller (Maestro R+C HUIRACOCHA)