"No es por las Obras"
-Y ahora, ¿Qué?-
"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe"
(Efesios 2:8-9)
Supongamos que ya hemos sido iniciados en un Templo de la Rosacruz y que nuestros fratres y sorores nos han dado la enhorabuena. En ese instante nos sentimos exultantes, como si algo hubiese cambiado, de forma radical, en nuestras vidas; pero ahora, nos decimos que hemos de comenzar una nueva vida, ser mejores personas con los demás y abandonar nuestro natural egoísmo…
A los conversos, en las iglesias evangélicas se les cuenta que por el mero hecho de tener Fe, ya son salvos. Ésto es cierto; pero muchos lo mal entienden; dado que es la Fe, la Pistis Sophía, en definitiva, la Gnósis o Conocimiento de Dios, la que nos transforma, haciendo que las buenas obras sean algo intrínsecas a nuestra nueva condición de iniciados; ahora bien, ¿Estás seguro de que que la dramatización teatral por la que pasaste, hizo que, en verdad, te iniciaras?, ¿Que nacieras de nuevo?, ¿Adquirieses la Fe? y por lo tanto, ¿Te transformaras en una Persona de nuevas y buenas Obras?
"Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle? Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma."
(Santiago 2:14-17)
La Gnósis sin Obras, no solo es que sea Fe muerta; es que, ni siquiera es Fe, no es Gnósis pm. Será otra cosa diferente, en tanto que poseer la Fe, recuerden que no es un mero creer en algo, conlleva, en sí, el realizar buenas obras; en tanto que, la Personalidad va siendo sustituida, de forma paulatina, por Cristo, el Maestro Interior y ese nuevo Yo es incapáz de otra cosa que no sea realizar buenas obras.
Así, vemos que cuando en el Púlpito se nos lee Efesios 2:8-9 y se nos recalca que la Salvación; es decir, la Transfiguración no es por las Obras, sino solo por la Fe, se nos está contando una Verdad a Medias; dado que, un versículo más adelante se nos cuenta:
"Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas"
(Efesios 2:10)
La Fe, la Gnósis, nos trae de de fábrica las buenas obras; dicho de otro modo: no es posible la Fe sin las buenas obras, dado que realizar buenas obras es sinónimo de estar en posesión de la Gnósis; es decir, de tener Fe en mayúsculas.
Bueno, y todo lo expuesto hasta aquí ¿Para qué?. ¿Queríais conocer si en verdad estábais iniciado, no es cierto?. Pues el realizar o no buenas obras es el termómetro que te indicará si en verdad lo estás o vives en una mera ilusión hipnótica. Si tu vida ha cambiado radicalmente y, sin esfuerzo, tus obras son buenas, seguro que estás iniciado; es decir, naciste de nuevo. Si, por el contrario, sientes que te cuesta un gran trabajo modificar tu antigua conducta, es síntoma de que, aunque te encuentres en proceso de ser iniciado, aún no lo estás. Ésto, mi Querido Amigo queda entre tú y tú, nadie te va a juzgar y mucho menos yo mismop.
No se trata, a ver cómo te lo explico, de que busques e intentes cambiar tu vida mediante un profundo y prolongado esfuerzo. Ésto no funciona así. Cambiando tu conducta de forma artificial y forzada no va a provocar tu Iniciación efectiva. Por el contrario, si en tu corazón se asienta la Fe; es decir, se produce la verdadera Iniciación, tu vida cambiará por completo y tu conducta y obras siempre serán buenas, en tanto que tú ya no eres el mismo de antes, sino uno nuevo dirigido por Cristo.
La Iniciación es consecuencia de despertar a la Verdad; es decir, de alcanzar la Gnósis, el Conocimiento de Dios y eso puede ser un proceso instantáneo, darse en un momento, o progresivo, alcanzarse de forma gradual; pero siempre, recuérdalo bien, debe darse sin esfuerzo; en tanto que es una Gracia de Dios, un Don, no algo que pudiera adquirirse mediante esfuerzo o a cambio de trabajo y dinero.
Mantenerse en una paciente espera, como en el Taoísmo, es la mejor fuente de Iniciación; mientras tanto, todo tu estudio y dramatizaciones ritualísticas te servirán para que la Personalidad vaya comprendiendo lo que le espera y como medio de preparación para cuando llegue el día de la Iluminación; que no es otra cosa que el día de tu verdadera Iniciación. Y eso es lo que significa el simbolismo de retirar la venda de los ojos en el Ritual; y da igual si esa dramatización iniciática es masónica o Rosicruciana de cualquier tipo.
Si esa Iluminación no se ha dado; pero tú crees estar Iniciado, ten presente que se trata de una autosugestuón pasajera y que si no eres consciente de ello te provocará, a corto plazo, una gran frustración.
Como nos dejó dicho el Maestro Sedir, "Si ya has leído todo lo que tenías que leer y has pasado por la dramatización de lo que supone la Iniciación, lo único que te queda es sentarte y esperar, con paciencia, a que aparezca tu único y verdadero Maestro"
No te apures, sabrás cuando eso pase. No te quepa duda alguna.
Aralba R+C
